Listos para la Guerra

Acá en Argentina hay un juego muy famoso de estrategia de guerra que se llama TEG. Nunca me divirtió demasiado pero creo que si hoy en día jugamos con mi marido podemos llegar a conquistar el mundo entero. Otra de las tantas cosas que aprendimos últimamente es a hacer estrategias, alianzas y planes de ataque y contraataque de todas las formas y colores ya que nuestro rival es cada vez más impredecible.
Como sí todavía no hubiésemos aprendido a NO planificar, mi cuerpo sigue cagandose en nosotros y en todos los médicos. El lunes pasado me fui de la clínica y tenía que volver en una semana para ver si podíamos arrancar o no. Sin embargo, y con anticonceptivos a cuesta, y sin haberlos terminado aún, mi maldita indeseada decidió aparecer antes de tiempo. Si sí, ni mis médicos pueden hacer planes, ni las pastillas logran controlarme, así soy yo. El viernes, la desubicada se apareció así como si nada, dejándonos boquiabiertos sin saber que hacer. Gracias a dios que fue un día que la clínica estaba abierta y fuimos corriendo. Honestamente, tenía cero esperanzas, había ido hace cuatro días y no creía que el folículo haya desaparecido aún. Claramente, todavía estaba ahí y era más pequeño pero eso podría poner en riesgo el tratamiento futuro así que me sacaron sangre para medir el Estradiol (no tengo idea para que sirve esa hormona) y si daba bajo, podríamos empezar. No hay chance que la hagamos a menos que esté todo perfecto, más aún cuando sale de nuestros bolsillos.
Por las dudas, y en vista del fin de semana, fuimos a comprar los medicamentos ya que igualmente, tarde o temprano los íbamos a necesitar. Primera farmacia que entramos, no tienen el Gonal, que es con el tenía que arrancar. Alguien tiene alguna duda que estamos meados? En fin, llamando a otra, los conseguimos y desembolsamos parte de nuestros ahorros de dos años en 7 cajas de inyecciones, que equivalen a múltiples aplicaciones, se entiende.
Al fin de la tarde, recibí el mensaje de texto más inesperado (para que vean que no sólo recibo visitas de quistes y menstruaciones desubicados). Podíamos finalmente comenzar con la Fertilización In Vitro. Vamos carajo que tiramos la casa por la ventana!!! Finalmente, se dio y nunca pero nunca hasta ahora espere con tanta ansiedad empezar a pincharme. Cada vez falta menos, pensé en ese momento... Y ESTE va a ser nuestro ciclo!!
Ahora hay que sobrevivir el proceso. Como en toda guerra, hay que batallar y este va a ser nuestro Waterloo. Menos mal que esta semana y sin muchas expectativas, fui a un homeópata. Convengamos que hasta yo me di cuenta que mi bipolaridad no era normal, justificada y todo, no podía seguir llorando todos los días. Por lo tanto, hoy en día la medicina oriental y occidental están actualmente haciendo una alianza en mi cuerpo y atacando desde dos frentes distintos a un mismo enemigo para lograr un mismo objetivo: derrotar nuestra maldita infertilidad. Así que ganemos o no la guerra, te aseguro que vamos a dar una batalla épica digna de novela!!!